viernes, 12 de julio de 2013

Caso Bárcenas – Rajoy: Fuera ya se especula con dimisiones

Rajoy ni habla, ni se explica, ni responde, ni por supuesto está dispuesto a comparecer en el Parlamento para hablar de la financiación ilegal del Partido del poder, y aclarar si siendo ministro, no ha respetado la ley de incompatibilidades, y ha cobrado sobresueldos en negro. Ni sesión de control con preguntas, ni pleno extraordinario del Parlamento, ni rueda de prensa, ni comparecencia con periodistas cerca, el Presidente del Gobierno se plantea no dar la cara hasta, por lo menos, mediados de septiembre.
Ajeno al estado de indignación del país, con un partido cada día más preocupado por la incomprensible actitud de su Presidente, sin la mínima sensibilidad sobre el estado de alarma social en la que se encuentra el país, desoyendo los consejos para que de algún tipo de explicación (“yo no respondo a las declaraciones de un preso”, es el último argumentario oficial) el señor Rajoy no parece consciente de lo que está pasando fuera y dentro del país.
Y fuera la situación es que la prensa, la radio, la televisión y los medios digitales europeos, norteamericanos, y de América Latina, han dado un salto cualitativo respecto a la situación crítica por la que atraviesa Mariano Rajoy, y ya no ocultan, desde sus perspectivas informativas y editoriales, que el Presidente español puede caer por el caso de la financiación ilegal del partido del Gobierno y por el cobro de sobresueldos en negro aunque parecen ignorar la personalidad del Presidente español que se niega a explicarse y a comparecer en el Parlamento. Según ha dicho a periodistas partidarios que ha invitado a desayunar, si habla le daría credibilidad a las denuncias.
Tras la ofensiva que ha iniciado el ex tesorero del partido Luis Bárcenas, filtrando la doble contabilidad del PP, donde se refleja que el actual Presidente del Gobierno, habría recibido supuestos sobresueldos en negro, cuando fue ministro de Administraciones Públicas y de Educación en los gobiernos de José María Aznar, el “caso Bárcenas” ha cambiado de signo y ha pasado a ser el “caso Rajoy”.
Hasta ahora, los grandes periódicos de referencia, se habían venido moviendo entre las dudas sobre la credibilidad de Bárcenas y los continuos desmentidos Populares, aunque criticando la opacidad, oscurantismo y ocultismo del Presidente del Gobierno que con su silencio venía a dar la razón a todo lo que venían publicando los periodistas, de los que huía, refugiándose en garajes, o engañándoles, mandando a sus escoltas que los colocasen en un lugar por donde, en un acto oficial, no pensaba pasar.
Ya, algún periódico alemán (Die Tageszeitung ) habla de la mafia (“Basta con que tan solo una parte de las acusaciones sean ciertas para que el PP se parezca más a una mafia que a un partido político”); alguno italiano compara la situación actual del país con la Tangentópolis ( La Stampa) por el grado de corrupción generalizado y el comportamiento de la judicatura, y varios de Gran Bretaña (The Times, Daily Telegraph e, incluso, el Irish Times) ven insostenible, políticamente, la situación del Presidente del Gobierno sobre todo por el grado de indignación de una ciudadanía, harta de casos de corrupción y de abusos de poder. Tan harta que ya está empezando a peligrar no sólo el Gobierno, sino el propio sistema porque dice el Telegraph, existe un ambiente “prerrevolucionario”.
La primera consecuencia, según la prensa internacional, es que Rajoy, que de cara a la galería aún se muestra sereno, el hecho de que su nombre aparezca en las llamadas listas de Bárcenas le hace prácticamente imposible seguir actuando como figura impoluta del PP. Pero puesto que las fuerzas de Rajoy están focalizadas sobre todo en la superación de la crisis económica, los comentaristas interpretan que tampoco puede optar por una huida hacia delante. Antes bien, depende de la unidad de su partido, que se está resquebrajando por el miedo, porque un juez ha obtenido pruebas demoledoras, proporcionadas por un periódico, que afirman que el presidente Mariano Rajoy aceptó pagos ilegales cuando era ministro.
“La izquierda pide su cabeza pero también – afirma el periódico británico The Daily Telegraph – lo están haciendo algunos miembros del Consejo General del Poder Judicial”.
“Los ciudadanos no pueden tolerar una situación en la que el Presidente recibió pagos no declarados” manifestó José Manuel Gómez, miembro del Consejo. Gran parte de los integrantes del partido en el poder aparecen mancillados por una red de fondos encubiertos. Si esto se demostrara, continúa Gómez, plantearía una amenaza muy grave “a la España democrática”.
 
 
COMENTARIO DE LA CASA
¿QUE MAS DECIR? A LA CALLE YA
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario